Otras dudas

¿Cuánto cuesta cambiar de compañía eléctrica?

Ya sea porque no estás satisfechos con el trato de tu compañía actual, la tarifa que tienes contratada no termina de encajar con tus hábitos de consumo o bien porque buscas un posible mayor ahorro con otra comercializadora del mercado eléctrico, no importa el motivo, la clave es que eres totalmente libre de cambiar de compañía eléctrica.
Al contrario de lo que sucede con las compañías de telecomunicaciones, por ejemplo, que cada dos por tres elegimos un nuevo proveedor de internet, pasarse a otra comercializadora eléctrica no es tan común entre la población pese a que el descontento suele ser generalizado por elevado precio que, en ocasiones, experimenta la luz.
Sin embargo, ¿es algo tan simple cambiar de compañía eléctrica? Y, sobre todo, es ¿gratuito?

El precio de cambiar de compañía eléctrica

Puedes respirar aliviado y es que, en principio, cambiar de compañía eléctrica es un proceso completamente gratuito. Sin embargo, existen una serie de circunstancias en las que si podríamos vernos obligados a abonar algún tipo de importe.
El principal motivo de aquellos casos en los que los clientes de una comercializadora se ven obligados a pagar para ser capaces de cambiar de compañía eléctrica suele ser la existencia de una cláusula de permanencia en el contrato de la tarifa, período de tiempo que conlleva una penalización económica si no se cumple.
Estas permanencias suelen venir camufladas tras tarifas de precio fijo anual, descuentos u otras ventajas. Por ello, para poder cambiar de compañía eléctrica en cualquier momento y sin ningún tipo de problema, es muy importante fijarse en la existencia de dichas cláusulas a la hora de elegir tarifas de luz.

¿Se interrumpe el suministro al cambiar de compañía eléctrica?

A parte de posibles cobros sorpresa, otra de las grandes preocupaciones de los consumidores a la hora de cambiar de compañía eléctrica es el miedo a la posibilidad de verse sin electricidad en sus hogares durante el tiempo que conlleve el cambio.
Nada más lejos de la realidad; al cambiar de compañía eléctrica, una vivienda nunca se verá desprovista de energía ya que, a diferencia de las compañía telefónicas, las infraestructuras que nos proveen de electricidad son las mismas sin importar la comercializadora.
Podemos decir que el único coste de cambiar de compañía eléctrica será el de correr el riesgo de escoger una nueva que no se ajuste totalmente a tus necesidades y hábitos de consumo. Para evitar este tipo de errores, contamos con una herramienta muy útil: el comparador de tarifas de luz. Con esta herramienta, podremos encontrar la comercializadora perfecta para nosotros, ya seamos jóvenes estudiantes que comparten piso o una familia más numerosa y tradicional.