¿Qué potencia de luz contratar según tu tipo de hogar?

Te ayudamos a calcular cuántos kW de potencia eléctrica necesitas en casa, incluso con aerotermia, y cómo evitar pagar de más en tu factura.
¿Qué potencia de luz contratar según tu tipo de hogar?
Elegir la potencia eléctrica adecuada es una de las decisiones más importantes que puedes tomar en lo referente a tu suministro de electricidad. No solo afecta a cuánto pagas cada mes en tu factura, también determina cuántos electrodomésticos puedes usar al mismo tiempo sin que “salten los plomos”. Si estás pensando en ajustar tu contrato o acabas de mudarte, en este artículo te explicamos cómo saber qué potencia de luz contratar según tu tipo de hogar, y cómo evitar errores comunes.

¿Qué es la potencia contratada y por qué es importante?

La potencia contratada es el número de kilovatios —kW— que puedes usar de forma simultánea. Es decir, cuánta energía puedes consumir a la vez sin que se dispare el interruptor de control de potencia —ICP—. Esta potencia no varía mes a mes como el consumo; se paga una parte fija en la factura, y es una de las principales responsables de que tus recibos sean más caros o más baratos. Por eso, si contratas más potencia de la que necesitas, pagarás de más cada mes sin motivo. Y si contratas menos, puedes sufrir cortes continuos cuando uses varios electrodomésticos al mismo tiempo. En resumen: acertar con la potencia contratada es clave para no tirar el dinero ni tener problemas en casa.

Factores clave para calcular la potencia eléctrica necesaria

No existe una potencia “ideal” universal. Depende de varios factores que conviene tener en cuenta:

Tipo de vivienda y tamaño

Un estudio de 40 m² no necesita lo mismo que una casa unifamiliar de 150 m². Cuanto más grande es el hogar, más aparatos suelen usarse y más puntos de consumo hay —iluminación, cocina, climatización…—. Por ejemplo:

  • Estudios o pisos pequeños: suelen arreglárselas con potencias de 3,3 a 4,6 kW.
  • Pisos familiares: entre 4,6 y 5,75 kW si tienen horno, lavavajillas o aire acondicionado.
  • Casas grandes o chalets: entre 5,75 y 6,9 kW, especialmente si cuentan con sistemas eléctricos de calefacción.

Número de personas en el hogar

Vivir solo no es lo mismo que vivir en pareja o con tres hijos. Cuantas más personas convivan, más probable es que se usen varios aparatos a la vez. Para un hogar de una sola persona, 3,3 kW podrían ser suficientes. Una familia de cuatro personas suele necesitar entre 4,6 y 6,9 kW para evitar cortes.

Uso de electrodomésticos y sistemas como la aerotermia

Aquí está el factor más decisivo. Tener aerotermia, vitrocerámica, horno eléctrico, secadora o incluso un coche eléctrico puede disparar la necesidad de potencia.

  • Con aerotermia: según el modelo y el tamaño del sistema, podrías necesitar entre 5,75 y más de 9,2 kW.
  • Con cocina eléctrica, horno y termo: entre 4,6 y 6,9 kW.
  • Con cargador de coche eléctrico: suele requerir al menos 6,9 kW, aunque puede depender de si se carga de noche y del uso simultáneo.

¿Cuántos kW contratar según el tipo de casa?

Ejemplos de potencias habituales

Veamos algunos ejemplos reales:

  • 3,3 kW: para viviendas pequeñas, pocos electrodomésticos y uso no simultáneo.
  • 4,6 kW: ideal para pisos estándar, sin calefacción eléctrica y con uso moderado de cocina.
  • 5,75 kW: cuando ya tienes horno, vitro, lavadora y aire acondicionado funcionando de forma habitual.
  • 6,9 kW o más: casas grandes, aerotermia, cargadores de coche, sistemas de climatización avanzados.

¿Es suficiente 4.6 kW?

4,6 kW es la potencia más contratada en España. En muchos hogares, especialmente pisos medios, es más que suficiente. Pero si te gusta cocinar con horno mientras pones la lavadora y tienes el aire acondicionado encendido… puede que te salte el ICP. Por otro lado, muchas personas tienen más de 5,75 kW contratados sin necesitarlo. Esto se traduce en un gasto fijo innecesario que se acumula mes a mes.

Cómo saber cuánta potencia necesitas

Simuladores online y herramientas de cálculo

Existen herramientas gratuitas para calcular tu potencia ideal. Puedes encontrar simuladores en las webs de las distribuidoras o usar nuestras tarifas personalizadas en Acis Energía, que te ayudan a adaptar tanto el precio como la potencia según tus hábitos de consumo. Estos simuladores tienen en cuenta la suma de potencias de tus electrodomésticos, el uso simultáneo y el tipo de vivienda.

Revisión del historial de consumo eléctrico

Si ya llevas tiempo viviendo en la vivienda actual, puedes revisar tus curvas de carga históricas. Se trata de un informe que puedes pedir a tu distribuidora que muestra cuánta potencia has llegado a usar realmente. Este dato es clave: si nunca pasas de 4 kW, no necesitas 5,75 kW. Y si llegas a 6,2 kW durante picos, quizá te compense mantener una potencia más alta si no quieres preocuparte por cortes.

¿Cuánto cuesta cambiar la potencia de luz contratada?

Cambiar la potencia tiene un coste regulado por el Gobierno. Subirla o bajarla implica pagar unos 11 € por kW modificado más IVA. Además, solo se puede hacer una vez cada 12 meses, salvo que justifiques un cambio por instalación nueva o variación técnica. Por tanto, es importante tomar esta decisión bien asesorado. En Acis Energía podemos ayudarte a ajustarla a tus necesidades reales sin sorpresas. Además, nuestras tarifas son 100% renovables y pensadas para que pagues lo justo.

Errores comunes al elegir la potencia contratada

  • “Por si acaso”: mucha gente contrata potencia de más por miedo a que se corte la luz. Pero este sobrecoste puede suponer cientos de euros al año.
  • No revisar el historial real: si ya tienes datos de consumo, lo más lógico es usarlos para decidir.
  • No tener en cuenta electrodomésticos nuevos: si instalas aerotermia, placas solares o cambias la cocina de gas a vitro, la potencia se debe ajustar.
  • Pensar que siempre necesitas más: a veces se puede optimizar el uso. Por ejemplo, poner la lavadora cuando terminas de cocinar, en lugar de todo a la vez.

¿Qué pasa si tengo placas solares o autoconsumo?

En viviendas con instalaciones solares la necesidad de potencia puede reducirse, dependiendo del nivel de autoconsumo y de si tienes baterías. Si produces mucha energía propia durante el día, puedes rebajar la potencia contratada para las horas solares y mantener algo más para la noche. ¿Te imaginas reducir tu potencia contratada porque produces tu propia energía? En Acis Energía no solo ofrecemos tarifas, también instalamos sistemas de autoconsumo adaptados a tu vivienda.

Conclusión

Ajustar tu potencia eléctrica no es solo una forma de optimizar tu factura: es una manera de usar la energía de forma más eficiente. Un pequeño cambio en la potencia puede traducirse en grandes ahorros a lo largo del año. Si aún no sabes qué potencia contratar o crees que estás pagando de más, déjanos ayudarte. En Acis Energía analizamos tu caso, ajustamos tu tarifa y, si quieres, instalamos sistemas para que produzcas tu propia energía. Contáctanos y uno de nuestros asesores te ayudará sin compromiso. ¿Y tú, sabes si estás pagando por una potencia que realmente no necesitas?