¿Sabías que un coche se puede reciclar?

¿Sabías que se pueden reciclar desde los neumáticos hasta las bolsas de aire de tu coche? Descubre en este artículo cómo se recicla un coche en España.
23 ago 2022
¿Sabías que un coche se puede reciclar?
Seguro que no tenías ni idea de que se puede reciclar casi todo de un coche, ¡hasta el 95%! Esto es como todo: lo más importante al final es reciclar. Cuando tu coche ha llegado a su fin, lo mejor que puedes hacer es apostar por su reciclaje.

¿Reciclar un coche? ¿Es eso posible?

Tú en tu casa reciclas, ¿a que sí? ¡Pues esto es lo mismo! Si ha llegado la hora de decirle adiós a tu viejo coche —sea por el motivo que sea—, tenemos que darle la salida correcta. Existen lugares donde se pueden dejar los coches para tratar todo lo que pueda ser reciclado. En España se reutiliza o recicla más de un 85% de un coche, estando en la media de la Unión Europea.

Dónde reciclar un coche

En el Real Decreto 20/2017 del 20 de Enero, se especifica que el propietario de un coche que quiera deshacerse de él es responsable de entregarlo en uno de los Centros Autorizados de Tratamiento —CAT—. En la página de la DGT puedes consultar el listado en un mapa.

En estos centros se aseguran de cumplir las normas marcadas de acuerdo a la ley para poder reciclar o reutilizar cada parte como sea necesario. Siempre puedes consultar la web de SIGRAUTO, página de la Asociación Española para el Tratamiento Medioambiental de los Vehículos Fuera de Uso.

Cómo reciclar un coche

Para poder reciclar un coche debemos seguir unas pautas, por eso debemos poner nuestro coche en manos profesionales que puedan reciclar el coche como se debe. ¿Sabías que los neumáticos se utilizan para hacer pastillas de freno, césped, suelas de zapatos o muebles? Incluso se usa en carreteras, donde mezclados con asfalto mejoran la contaminación acústica un 40%. ¡Aquí todo se puede reciclar!

Otra parte que no imaginabas es el airbag, utilizado para hacer trajes de neopreno. Las zonas aislantes y plásticas se reutilizan en la construcción de casas, lo cual ayuda a reducir el ruido. Sin olvidar los aceites del coche, los cuales se convierten en combustible de uso industrial.

La parte más sencilla del reciclaje es el metal: después de aplastarlo, se prensa y funde para conseguir nuevos metales —acero, aluminio, cobre…—. ¿A que no esperabas tantos usos para tan poca cosa?